Historia de la
Devoción
La
Cuatro Condiciones
Los Nueve
Domingos
Biografía del
Padre Rizzo
Oraciones al
Divino Niño
La
Confesión |
Septimo
Domingo
Oración
para todos los domingos
Consideración: Jesús multiplica
los panes
Lectura del Santo Evangelio según
San Juan: (Jn 6, 1-15) Después de esto,
se fue Jesús a la otra ribera del mar de Galilea, el de Tiberíades, y
mucha gente le seguía porque veían las señales que realizaba en los
enfermos. Subió Jesús al monte y se sentó allí en compañía de sus
discípulos. Estaba próxima la Pascua, la fiesta de los judíos. Al
levantar Jesús los ojos y ver que venía hacia él mucha gente, dice a
Felipe: «¿Dónde vamos a comprar panes para que coman éstos?» Se lo decía
para probarle, porque él sabía lo que iba a hacer. Felipe le contestó:
«Doscientos denarios de pan no bastan para que cada uno tome un
poco.» Le dice uno de sus discípulos, Andrés, el hermano de Simón
Pedro: «Aquí hay un muchacho que tiene cinco panes de cebada y dos peces;
pero ¿qué es eso para tantos?» Dijo Jesús: «Haced que se recueste la
gente.» Había en el lugar mucha hierba. Se recostaron, pues, los hombres
en número de unos 5.000. Tomó entonces Jesús los panes y, después de
dar gracias, los repartió entre los que estaban recostados y lo mismo los
peces, todo lo que quisieron. Cuando se saciaron, dice a sus discípulos:
«Recoged los trozos sobrantes para que nada se pierda.» Los recogieron,
pues, y llenaron doce canastos con los trozos de los cinco panes de cebada
que sobraron a los que habían comido. Al ver la gente la señal que
había realizado, decía: «Este es verdaderamente el profeta que iba a venir
al mundo.» Dándose cuenta Jesús de que intentaban venir a tomarle por
la fuerza para hacerle rey, huyó de nuevo al monte él solo. Palabra
de Dios.
Historia de la
Devoción al Niño Jesús en Colombia
Desde 1907 la
devoción al Divino Niño ha venido extendiéndose por todo Colombia. Primero
fueron las comunidades Carmelitas y después la Comunidad Salesiana,
quienes se han encargado de difundirla, pero los que más han propagado la
devoción han sido las personas que han recibido favores prodigiosos del
Divino Principito. Recordemos uno sucedido en 1915 y que contribuyó mucho
a difundir esta devoción. Está afirmado con juramento y apoyado por la
firma del Sr. Obispo. Dice así: " Mi hija María de 18 años venía padeciendo terribles dolores de
reumatismo. Eran tan grandes los dolores que padecía y tan devastadora la
inmovilidad que el reumatismo le estaba produciendo, que viéndola ya en
peligro de muerte llamamos al sacerdote que la confesó y le administró el
viático y la extremaunción. No podía hacer el menor movimiento de pies
o de manos sin sentir agudísimos dolores. Los medicamentos de los médicos
no le producían ninguna mejoría. Uno de los mejores médicos de la ciudad
venía cada día a visitarla, pero los ataques reumáticos eran cada día más
fuertes y le daban unas convulsiones que la dejaban medio muerta. El 10
de noviembre del año pasado cuando en uno de los terribles ataques creí
que se moría, al ver que recobraba otra vez el habla, se me ocurrió una
idea: corrí a mí habitación y me traje una imagencita del Divino Niño que
nosotros veneramos con mucho cariño, y acercándome a la enferma le dije:
`Hija, nuestro Señor hizo la promesa de que si le pedimos por los méritos
de su infancia, nuestra oración será escuchada. Pidámosle por los méritos
de sus 12 primeros años de vida que si te conviene para la salud del alma,
te conceda la salud del cuerpo. Dale un beso a la imagen del Divino Niño y
la colocamos luego junto a los pies que tanto te duelen` Ella besó
amorosamente al queridísimo Niño Jesús y luego colocamos la imagen en el
lecho, junto a la enferma y rezamos con toda fe. Pasada una hora, de
pronto mi hija gritó entusiasmada: `Papá, papá, estoy curada `. Y para
demostrarme que si era verdad, movía los brazos y los pies en todas
direcciones sin sentir el menor dolor (siendo que hasta hacía unos minutos
al menor movimiento de un brazo o de u pié daba un grito de dolor) Estaba
totalmente curada. Pronto nos reunimos todos los familiares y
emocionados dimos gracias al milagroso Niño Jesús que hace tales
maravillas. Después de 11 meses mi hija se encuentra muy robusta y sin el
más mínimo dolor de reumatismo y recomendamos a las personas necesitadas a
que en cualquier angustia, dolor o necesidad invoquen con toda confianza
al Niño Jesús que tanto goza ayudando a los necesitados. El señor Obispo
que nos honra con su amistad y que ha venido varias veces a visitar a la
enferma, atestigua también este milagro que los médicos no han logrado
explicar. Certificamos que esta declaración es verdadera, firmado: Mr.
Heladio, Obispo de Cali. Firmado, con
inmensa gratitud al Niño Jesús: Manuel Sinistera. Cali – 1916. Con favores
semejantes el Divino Niño Jesús ha ido tomando posesión del corazón de
miles y miles de Colombianos y hoy es difícil encontrar alguna ciudad
importante del país donde no haya una imagen del Divino Niño. Sus devotos
al propagar los favores que han recibido, van infundiendo cada vez más su
devoción. "Lo que pidieres al Padre en mi nombre, os lo
concederá"
Habla
Jesús
Gozos
Oración Final
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